
27.4.12
Las trolas femeninas de las películas

22.4.12
Familia no hay más que una, afortunadamente.
11.4.12
¿Habéis visto este anuncio, osea?
Había oído hablar de este anuncio, pero no lo he visto hasta que me lo ha enviado mi amiga Sara, con clara intención de que por un lado admirara al siempre apetecible Martín Rivas y por otro me descojonara como una salvaje con el contenido del chorrireportaje pijogay de Loewe.
¡¡¡PORDIOSSSCUANTATONTERÍAAAAAAAAAAAA!!!! OSEA OSEAAAAAAAAAA.
Pero esta vez es un osea moderno, con matices, nada de Tamaras Falcó, porfa, que somos rubias pero enseñamos raíz negrata y esta de aquí, que es superguerrera, se ha rapado media cabeza a lo Alice Dellal que es superpunk y supertrash y es musa de Karl Lagerfeld, y vosotras no lo seréis nuca, quelosepais. Y luego los chicos, grrrr…espera, porque son chicos, ¿no? Bueno, Martín Rivas (que parece Chuck Norris al lado de tanta flor) está para zumbárselo repetidas veces como acostumbra, siempre que no abra demasiado la boca, que se le nota mucho que es hijo de un escritor y es muy dado a la floritura verbal.
Si tuviera la pasta, no me importaría comprarle a mi hombre una chupa de cuero de Loewe, porque son una pasada, pero si al ponérsela se le va a poner esa cara de cervatillo desvalido de piel terrrrsa y flequillo ladeado que se gastan los del anuncio, casiquepaso.
¿Se supone que querían modernizar la marca, o acercarla al público joven o algo así? Vamos, yo lo que he sentido viendo el anuncio es una mezcla de descojone, estupor y vergüenza ajena que ni me he fijado en los bolsos que lucían sobre sus teñidas y fashioneras cabecitas. Qué guantazo más estupendo necesitan, los pobres…ellos, y los creativos publicitarios que los han parido.
Por cierto, la frasecita estrella de Rivas: "mi truco infalible para ligar es aparentar que no quiero ligar".
Colega, TÚ plántate en cualquier parte, mira a una tía a los ojos un par de segundos, y aunque vayas vestido de David Delfín te come lo que haga falta allí mismo!! Como si necesitaras estrategia… Amos, anda!
Dedicated to Sara, la culpable de que lo haya visto, ja,ja,ja.
9.4.12
Pon un motero en tu vida
Ahora que por fin ha vuelto el mundial de motos, tras un invierno laaaargo de sequía, ahora que por fin los domingos vuelvo a tener una cita con Marc Marquez (si tuviera 20 años estaría loca por él) con Nicky Hayden (estoy loca por él) y con Alberto Puig (si tuviera 45 años estaría loca por él) he decidido hacer un repaso aclaratorio de los diferentes tipos de motero y sus monturas para abriros la mente a las que no hayáis abrazado con todas vuestras fuerzas a un maromo a más velocidad de la permitida y os apetezca hacerlo. Las que tienen moto propia en el garaje también están invitadas a leer, pero sobre todo a opinar ; )
Dícese de la moto de gran cilindrada, carenada (como las de carreras) pegatinas a mogollón y carácter pendenciero y agresivo. He ahí una buena definición también para sus jinetes. Les encanta la velocidad, arriesgar a tope en la carretera (para eso tienen un pepino que supera sobrada los 200km/h) y no les gustan las normas. Ni las de la Guardia Civil ni las que impone una relación seria. Esta clase de tío se gasta 600 euros en unos neumáticos para quemarlos en un fin de semana de carreras en Jerez. Tú misma, si te van los exhibicionistas…
Scooter
Me gusta que salgas con ese chico tan mono y educado, diría tu madre. Tiene un trabajo estupendo en el banco, es de muy buena familia y siempre va tan aseado…La verdad es que sí, míralo, impecable, si ni se despeina cuando se quita el casco! Ah, sí, claro, la gomina…Él te dirá que es una moto muy cómoda, que puede dejar el casco debajo del asiento, que tiene espacio para su maletín..¡Pues cómprate un Smart, que abulta prácticamente lo mismo y no te mojas cuando llueve!! Bah! Repeinao, que eres un repeinao.
Vespa
Ay que mono….míralo con esa cosita tan chiquitita entre las piernas…¿de dónde te has escapado, de Vacaciones en Roma? Uy pero si es negra, ¡qué malote!! Anda, tira, Maripili, que con ese bichito de la Señorita Pepis no me vas a llevar a ninguna parte y mucho menos al huerto. ¡Siguiente!
Ducati Monster
Ahora en serio, imaginaos a la puerta de un garito aparcadas juntas la vespa de antes y esta moto. ¿Con qué tío de los dos os iríais? ¡¡Si es que no hay color!!! Me ENCANTA esta moto. Es de lo más cool y salvaje del mercado. Es tan bonita que podría tener una en el salón de mi casa sólo para verla. El tipo que conduzca con estilo una de estas es un máquina en la cama, seguro. Una única pega, no es muy grande, y es un poco bicho, la he llevado y has de acelerar lo justo, si no se te escapa, vaya, también es una buena actitud con el conductor. Si te pasas de intentar controlarlo se te escapa, pero si le coges el punto, es una auténtica pasada montarlo…digo montarla!! Si tienes menos de 30 años y mides menos de 1’75, chaval, con una Monster y un poco de actitud, no hay fémina que se te resista.
BMW, Triumph o nakeds en general
Si tienes más de 30 años y / o mides más de 1’75, es hora de que cambies la Monster por una hermana mayor. Esta es la clase de moto que lleva un hombre cañón. Un tío duro sin estridencias, un punto clásico pero con actitud. Lo único complicado de este hombre es que casi siempre está pillado. Si quieres uno de estos, ve a por el de la Ducati, hay más probabilidades de que esté disponible. Ya se convertirá en un BMW o en un Triumph en unos años.
Motos On off
Esta es la versión deportista del apartado anterior. Motos que igual funcionan en carretera asfaltada que fuera de ella. El propietario suele ser un tiarrón (son motos muy altas, de gran cilindrada y rabiosas) dado a la aventura y los deportes, a las escapadas de fin de semana y a llevar las botas con restos de barro. Barba de tres días, tienda de campaña o refugio de montaña los que ya peinan canas, poco dado a las mujeres enjoyadas, repeinadas y amarujonadas. Con este no te aburres. Fijo.
Harleys (no se admiten imitaciones)
Nada de japonesas custom, por favor, seamos serios. He de reconocer que a mi se me caen las bragas absolutamente ante un espécimen tatuado, encuerado y con cara de vicioso encima de una máquina de 300 kilos que tiene más cosas en común con un tractor que con una motocicleta. Y más si está tan bueno como el de la foto (Sons of Anarchy, buena serie) Pero como además de estar buena tengo cerebro y algunos años de experiencia, sé que uno de estos sólo sirve a corto plazo. Uno de estos es Polvomán, pero ni se te ocurra convertirlo en tu hombre!! Tiene exceso de actitud. Y de roña.
1.4.12
No hacéis vestidos para chicas altas!

Mi problema son las longitudes. Tampoco es que sea un pino, pero mi 1’70 descalza ya se sale de la norma estandarizada de tamaño que se supone debemos tener las féminas en este país, y como se me ocurra ponerme unas cuñas con plataforma o unos stilettos decentes, ya paso del 1’80 y eso no hay vestido (ni hombre) que lo aguante.
Me encantan los vestidos tipo Hippy-chic, con metros y metros de tela vaporosa estampada que se mueven con delicadeza alrededor de tu cuerpo mientras andas. Poesía pura. Cuanto más ligera sea la tela, mejor. Roberto Cavalli es un máquina haciendo vestidos de este tipo, y esta primavera, Etro (foto de abajo) trae unos cuantos preciosos en la misma onda que el imperio Inditex no tardará en fusilar. Vestidos que insinúan, más que enseñan, que resbalan como agua sobre tu piel cuando te los quitas (mejor que te los quiten)
Vale, pues ¡¡no encuentro ninguno que me acople!!! ¿Veis la foto? Se supone que la tía es una modelo de cerca de 1,80 y el vestido largo le está por donde ha de estar un vestido laaaaargo, o sea, que sólo se vea la punta de tu zapato. Pues nada, no hay manera, todos los que encuentro yo me están cual percebeira gallega, acaban en esa zona que queda entre encima del tobillo y el comienzo de la pantorrilla. Altura de vestido que te hacía tu abuela. Altura AAAArggg!!!
¿Qué les costaba meter un palmo y medio más de tela? Si te queda largo, pues lo cortas, pero si te queda ridículamente corto, ¡no te lo compras! ¿No se supone que los vestidos larguiísimos quedan mejor a las chicas altas? ¡Coño, pues hacedlos de su tamaño!
Y luego están los cortos, los minidress, en los que me sucede lo contrario. Yo un vestido corto, lo convierto en un vestido escandalosamente corto, ridículamente corto, fulánicamente corto. Me paso la noche estirándolo como si fuera mi madre. Mejor unos shorts, que son aún más cortos pero menos incómodos de llevar, aunque me encantaría lucir una de estas bellezas de Alexander Mcqueen, aunque sólo fuera una vez, digamos por ejemplo acompañando a Til Schweiger al estreno de su última película…
La industria de la moda al por mayor ha cogido un modelo de tía que yo calculo en aprox 1’60-65 de estatura, unos 50 kg de peso perfectamente distribuido en: poco pecho, menos cintura y unas caderas con las que es imposible tener hijos. Y las que no entramos ahí (que me da a mí somos la mayoría) a retocar el modelito o a comprar un par de tallas más, que aunque te quede grande de un lado, te llegará abrochar de otro….